Masaoka Shiki (正岡子規 Masaoka Shiki?, 17 octubre 1867-19 septiembre 1902) fue un poeta, crítico literario y periodista japonés del periodo Meiji. Su verdadero nombre era Masaoka Tsunenori.
Nació en la ciudad de Matsuyama (prefectura de Iyo). Pertenecía a una familia humilde de samuráis. Su padre era alcohólico y murió cuando el poeta tenía cinco años. En su juventud empezó a interesarse por la política y en 1883 se trasladó a vivir a Tokio. Allí se aficionó a jugar al béisbol y se hizo amigo del que más tarde sería uno de los mayores novelistas de la época, Natsume Soseki.
Shiki fue un renovador de la poesía haiku, de la cual es considerado uno de los cuatro maestros junto a Matsuo Bashō, Yosa Buson y Kobayashi Issa.
Precisamente, escribió un ensayo cuestionando la poesía de Bashô, llamado "Bashô zôdan"[1] y tres diarios, uno de ellos "Una cama de enfermo de seis pies de largo"[2].
Shiki compuso sus últimos tres haiku la mañana del 18 de septiembre de 1902. Los garabateó en una hoja de papel que normalmente usaba para sus pinturas. Su hermana Ritsu sostuvo el tenso papel sobre una mesa de dibujo. Shiki no dijo nada mientras escribía, ahogado por la flema. Nadie más pronunció una palabra; los únicos sonidos eran las toses ocasionales del enfermo. El primero de los tres haiku que Shiki escribió en esta ocasión sería conocido como su jisei, o “adiós al mundo”:
La luffa ha florecido;
mira al Buda
lleno de flema.
Shiki se ve a sí mismo como un Buda (un hombre muerto), pero aunque ésta fue su despedida del mundo, contiene un toque de humor, la incongruencia de un Buda ahogado por la flema. Shiki hizo una pausa después de escribir cada línea de este poema y antes de cada uno de los dos últimos haiku. Cuando hubo terminado el tercero, dejó caer el pincel, aparentemente agotado por el esfuerzo. Ritsu apoyó el tablero de dibujo contra la pared para que otros en la habitación pudieran leer los poemas.
A partir de entonces, Shiki sólo emitió gemidos de dolor. Una dosis de morfina no logró aliviar su sufrimiento. El médico, que llegó más tarde, tras algunas dudas le dio a Shiki otra inyección de morfina. Esto alivió el dolor y le permitió dormir; pero la doble dosis pudo haber precipitado la muerte de Shiki.
Shiki murió temprano en la mañana del 19 de septiembre de 1902. Tenía treinta y cinco años. Hekigoto, junto con Ritsu, lavó el cadáver y lo envolvió en sábanas. Las memorias de Hekigito describen el horrible estado del cuerpo de Shiki: después de siete años de confinamiento en un lecho de enfermo, sólo la mitad superior del cuerpo de Shiki parecía estar viva[3].